Cuando incursionamos en los negocios por internet, inversiones online y afines, nos vemos obligados a crear algún tipo de cuenta, en algunos casos dándo cierta y comprometedora información, en otros casos la información que tenemos que brindar es poca y poco comprometedora para vernos afectados de maner personal, pero casi siempre nos podemos ver afectados de manera económica o financiera.

Nos vemos afectados debido a que la cuenta que creamos en algunos negocios como los de tipo HYIP, requieren que coloquemos nuestras cuentas de procesadores de pago, por tanto si una cuenta de este tipo logra ser hackeada o robada es probable que quemos expuestos en diversas formas; por ejemplo:

Si trabajamos mucho con los procesadores de pago tipo Alertpay o Paypal, el hacker puede tratar de robarnos esas cuentas y de paso obtener la información de nuestras tarjetas de débito o crédito según sea el caso.

Si tenemos websites o blogs, los hackers tratarán de robártelo ya que decifran fácilmente el nombre de usuario y en lo que en sí se enfocan es forzar tu constraseña, si se lo proponen tarde o temprano es posible que lo logren.

La respuesta inicialmente es saber si los passwords que estamos utilizando son verdaderamente seguros muchos cometen el error de pensar que passwords como estos son seguros:

Estos y muchas combinaciones afines son la fórmula para el desastre, ya que los hackers usand programas computacionales sofisticados que prueban miles de posible contraseñas y si tu password no es lo suficientemente complicado entonces estás tentando a tu suerte.

Consistencia en este caso se basa en la cantidad de tiempo que un programa decodificador de passwords o contraseñas demora en potencialmente decifrar lo que tiene que decifrar.

Para ayudarte a crear una contraseña consistente existen también otros programas que te ayudan a crearlos, pero obviamente si lo hace un software es probable que no recuerdes ese password o te veas forzado a escribirlo o guardarlo en algún lugar que tal vez sea vulnerable en otros sentidos y para otras personas.

Normalmente queremos recordar casi todos nuestros passwords o contraseñas pero para poder hacer eso debemos pensarlas y crearlas nosotros mismos, entonces:

Puedes por ejemplo ingresar a páginas como

En ese website puedes probar algunos de tus passwords o constraseñas frecuentes y te saldrá el tiempo aproximado que le toma a una persona (el supuesto hacker) desde una computadora promedio (pc de escritorio) lograr descifrar tu password, como es obvio, mientras más tiempo le demore es mejor ¿verdad?.

Entonces ponte a probar nuevas formas de passwords hasta que logres obtener resultados de tiempo elevados en quintillones, sextillones o mucho más como “nonillones”, es decir, cantidad de años de un 1 seguido con 30 ceros, asi sabrás que tus nuevos passwords son mucho más seguro y le harás el intento a los hackers casi imposible de lograr algo y que se rindan en el intento. si te estás haciendo preguntas como:

La respuesta según su autor es Si, ya que los datos no son guardados o transferidos a ningún sitio.

Razonablemente

50% matemáticas y 51% de brujería (en este caso son algoritmos)

Si después de probar tus passwords frecuentes en ¿Qué tan seguro es mi password? notas que eres una personas que está acostumbrada a crear passwords no seguros, recomiendo que hasgas un alto y replantees seriamente la forma en que haces o creas tu constraseñas, hasta lograr un nivel de seguridad considerablemente mejor. Con solo hacer eso, habrás dado un paso gigantesco en lo referente a seguridad online y protección personal en la red, sobre todo recuerda nunca usar las mismas contraseñas por más seguras que las hagas en diferentes sitios, por tanto, otra tarea difícil que tienes que realizar es crear diversas contraseñas para los diversos negocios en los que participes.

Ah…! y algo más, no olvides modificar tus contraseñas sobre todo en los lugares o negocios que mayores ingresos te representan al menos 1 vez al mes, todo este esfuerzo te protegerá un poco más de posibles intentos de hackeo a tus cuentas online.