Esa es la preocupación de muchos emprendedores, de hecho es muy probable que antes de que el negocio este bien establecido se incurran en gastos para proteger sus ideas. 

Las ideas en si no son una propiedad, pero para algunas empresas estas son vitales. Las cosas se complican cuando las ideas se convierten en productos y servicios. 

Por lo general pasa que a usted se le ocurre alguna idea para un nuevo producto o servicio, solo que la mayoría de las veces usted la descarta, la pospone o la abandona.

Más adelante puede que descubra que esa misma idea se le ocurrió a otros y la comercializaron antes que nosotros lo hiciéramos siendo ya muy tarde para que nos beneficiemos de ello.

Como decía una simple idea no es suficiente. Se requiere mucho conocimiento, tiempo, dinero y esfuerzo para pulir una idea y convertirla en una invención viable aunque solo sea en papel.

Convertir una invención en algo innovador o un nuevo producto aceptado por el mercado, requiere de un gran esfuerzo y algo de suerte.

Cada año son miles las personas, por lo menos en Estados Unidos que solicitan proteger sus ideas bajo las leyes de patentes, marcas registradas y derechos de autor.

Estas son las formas usuales en que la gente puede proteger sus invenciones o ideas. La escogencia de una en particular depende del tipo de idea a proteger.

Cada categoría defiende un aspecto distinto del trabajo o expresión creativa del autor.

Las patentes, derechos de autor y marcas registradas, así como la “técnica o conocimientos específicos” o los secretos de un negocio, a menudo se los llama de manera colectiva: propiedad intelectual.

Son muchas las empresas o personas que cuentan con esa propiedad sin siquiera darse cuenta de ello o de la necesidad de tomar medidas para proteger tal propiedad.

Como ya decía es probable que muchas personas que están iniciando un negocio determinado sientan la necesidad de registrar una marca o una patente, sin que el negocio haya madurado como tal.

Eso puede ser contraproducente pues hacer un registro no solo requiere esfuerzo, tiempo y dinero, sino que usted bien puede aburrirse de lo que está haciendo o el negocio no funcione como usted espera y al final lo que ha hecho es perder tiempo, dinero y esfuerzo.

Usted debe ser lo suficientemente hábil para saber cuando registrar una marca o un procedimiento.

En todos los países del mundo existen oficinas de registro de la propiedad intelectual, donde usted o un abogado de su confianza puede hacer los trámites requeridos y necesarios.

Si usted considera que su negocio es todo un éxito, bien vale la pena que proteja sus ideas y procedimientos. Cuesta pero de esta manera usted se asegurará regalías o que no se copien sus inventos sin pagarle a usted. Saludos